Viendo la secuencia de fotos hay poco más que explicar.
De algún objetivo o vieja webcam podemos desmontar la lente y extraer la sección de cristales que hacen la función de «lupa» de esa montura. A continuación con un soldador de estaño o una púa calentada sobre una vela agujereamos una pinza grande y de plástico de la ropa de tal manera que:
A) la lente se superponga exactamente con el centro del objetivo de la cámara de nuestro móvil y siempre estando la pinza ubicada en una posición estable (y repetible).
B) la lente debe estar apoyada por completo sobre el objetivo de la cámara de nuestro móvil, sin inclinaciones ni espacios laterales.
Una vez hecho el agujero pegamos con cualquier adhesivo de contacto rápido la lente a la pinza. Para asegurarnos que durante el proceso de secado la lente no se mueve lo ideal sería dejarlo secar manteniendo la pinza sobre una tabla, cartón rígido o similar (cualquier cosa del grosor del móvil que no sea el móvil para evitar accidentes en caso que el pegamento toque con el teléfono)
Si ponéis un poco de atención en el momento de hacer el agujero para que la pinza caiga bien sobre el teléfono poner y quitar la lente es facilísimo y apenas ocupa espacio en nuestra mochila campera.