Este apunte responde la adivinanza de ayer, ¿que tienen en común las setas, las orquídeas, los líquenes y el tajo de Peñas Blancas? correcto, la respuesta correcta eran los hongos.
La seta
A la mayor parte de nosotros si nos dicen la palabra hongo se nos viene a la cabeza inmediatamente la imagen de una seta, un champiñón o un boleto.
Es algo comprensible, la mayor parte de los hongos que tenemos a nuestro alrededor son diminutos, sin un desarrollo ostentoso, prácticamente inexistentes. Nos percatamos de su presencia cuando en la temporada de lluvias emergen del suelo por un momento para esparcir sus esporas y rápidamente vuelta a la oscuridad.
Todo los hongos tienen en común su incapacidad para sacar provecho de la energía luminosa del sol. Puesto que carecen de clorofila es innecesario un cuerpo aéreo que expuesto a la luz solar. Allí abajo tienen casi todo lo necesario para sobrevivir y los hidratos de carbono que les faltan lo toman, bien parasitando las raíces de otras plantas o bien desarrollando una relación mutuamente beneficiosa llamada simbiosis, como en el caso de las orquídeas.