¿Os había dicho que aprobé por fin las oposiciones? Es que he estado tan liado quitando cipreses del jardín -más de veinte- y luego levantando roales de grama, para finalmente meter malla antihierba y echar encima bolo rojo que se me había pasado.
Este verano no hemos hecho ningún viaje (entendiendo por «viaje» una salida a más de 400 km de distancia). Una semana en Cabo de Gata

y otra en Playa Honda

, junto a Calblanque

.
Y luego, Portús, La Manga, Los Simonetes y mucha Santa Ana…
Me hubiera gustado haber podido organizar alguna que otra visita a casa de algun@s amig@s. Pero, no ha sido posible. A ver si el verano próximo, con Nerea y Miguel más crecidos…
A modo de resumen, que me hacían hacer los maestros tras las vacaciones, puedo decir que de funcionario -en prácticas- se está muy bien. Básicamente porque ahora puedo leer lo que quiera y tengo las tardes libres -sin necesidad de estudiar cosas que ya sabía y con tiempo para los míos.
Este año me ha tocado el CEIP «Vicente Medina», un colegio llamado «de integración» porque más de la mitad del alumnado es inmigrante. Mis primeras impresiones han sido muy buenas, hasta el punto de que estoy pensando en solicitar quedarme definitivamente en él.
El verano ha sido estupendo. Hemos disfrutado de la playa, de la piscina, del parque, de la familia… lo normal.
Las oposiciones ya son un recuerdo. Este era mi año, y así se lo hice saber a mi hermana Mónica que me ayudó a desbrozar y pulir el inglés de la programación que debía defender ante el tribunal. Y Alberto me ayudó con el diseño gráfico de portadas e imágenes. Una labor conjunta que ha dado fruto. Les debo una. También a Mercedes, por supuesto. Sin su guía habría sido imposible. Ella aprobó el año pasado, y viví en primera persona cómo se hace eso de aprobar unas oposiciones: es más una cuestión de actitud que otra cosa. Estudiar hay que estudiar, por descontado. Pero no solo eso. Tienes que sumergirte en un mar de baremos y medidas que tendrán en cuenta y ser muy organizado, sobre todo, con el tiempo con el que cuentas para estudiar, y para terminar las pruebas… Cada vez que me acuerdo, respiro aliviado.