Que este sistema no es democrático ya lo sabemos más de uno. Un estado democrático debe estar gobernado por representantes del pueblo, no por representantes de partidos en los que la voz del pueblo brilla por su ausencia.
La dirección del partido valenciano ha puesto en sus listas a 10 imputados en delitos de corrupción. Ha sido la dirección valenciana, luego aplaudido todo desde la dirección nacional del PP. Y resulta que la intención de voto del PP en Valencia, lejos de disminuir aumenta y algo similar le sucede al PP nacional.
A la falta de ética en el partido que pronto gobernará España, y que pondrá lo poco rentable que queda en manos de sus amigos, los medios de difusión trivializan y la Justicia mira para otro lado. Todos echan balones fuera.
Y ¿qué hace la oposición? Palabras, palabras, palabras. No está mal. Pero deberían pasar a la acción (entre otras cosas porque las palabras se las lleva el viento y eso cuando se publican y alguien las lee), que les pagamos para eso.
La situación es crítica. Al robo realizado desde bancos y cajas el sistema ha respondido devolviéndoles el dinero. No hay delito que valga. ¿Cómo lo va a haber, si muchas cajas están dirigidas por concejales y los bancos son los que cubren la deuda electoral de los partidos?
El mes que viene habrá elecciones y muchos nos debatimos entre votar propuestas minoritarias o mandarlos a todos a donde Labordeta dijo, dando por nula la papeleta. Y esa es la papeleta que tenemos.
Menuda papeleta
sábado, 9 de abril de 2011 (Hace 187 dias)Ocho años blogeando
sábado, 2 de abril de 2011 (Hace 194 dias)Hoy se cumplen 8 años desde que empezara a blogear en este Cuaderno de campo. Casi ná. Si no fuese mentira diría que parece que fué ayer, pero es que no parece que fuera ni antes de ayer. Ocho años, pues no ha llovido desde entonces.
En el 2002 estaba yo recíen aterrizado de vuelta después de cuatro años de exilio laboral en Madrid y casi lo primero que hice fue montar mi propia página y abrir un dominio en dyndns, trebol.homedns.org, que apuntaba a unas pocas páginas html estáticas.
Al poco tiempo descubrí la web de un ex-compañero (aka Earful) de trabajo en la que había puesto un sistema web de publicación de anotaciones ordenadas cronológicamente al que llamaban «blog«, palabra derivada de «log«, que es el archivo en el que un ordenador registra los eventos que una aplicación o un dispositivo produce durante su uso. Me encantó la idea de poder contar y despotricar a diestro y siniestro sin más censura que mi propio sentido del ridículo y como por entonces ya conocía la función echo ( y hasta incluso la de print ) de PHP me hice mi propio sistema de gestión y publicación de contenidos ó CMS ( Content Management System, que llaman los listos ).
De este modo empezó a correr la primera versión del blog el 2 de Abril 2003 que era básicamente un PHP-formulario que al pulsar el submit «Publicar» producía un HTML en una carpeta de acceso público. Bendito CMS original (y primitivo). Aquello era sólido como una roca. Ni spam, ni base de datos, ni plugins, ni trackback, ni etiquetas, ni leches en vinagre… aquello no tenía features, ni themes, ni bugs, por no tener no tenía ni visitas. El problema era que, claro, florituras las justas. Para cada apunte un html, cada html una carpeta y en dicha carpeta los comentarios en formato TXT. Os podeis imaginar.
Para cambiar el contenido de un apunte tenía que descargarme a mi máquina el html, editarlo, subirlo via ftp y comprobar los permisos de lectura. Como tuviera que corregir 3 ó 4 apuntes me daban las 4 de la mañana. Cuando llevaba 20-30 apuntes en el blog estaba ya hasta los mismisimos, más que un CMS primitivo aquello era un CMS asilvestrado…
Asi es que al poco tiempo me decidí a probar un sistema del que todo el mundo estaba hablando mucho y bien pero cuyo funcionamiento y concepto era incapaz de comprender. Yo, que venía de un blog más sencillo que el mecanismo de un botijo, cuya interfaz administrativa se componía de 2 PHP’s lo de WordPress con su base de datos, contraseñas, cientos de funciones, plugins y (ojo!!) hasta un sistema de edición de apuntes online… me sonaba a chino e irresistible.
Y desde entonces aquí seguimos. Con más ó menos frecuencia, más o menos participación, más o menos autores, etc… Algunas cosas han cambiado y otras siguen igual. Hace nueve años tenía claro que Cuaderno de campo no iba a ser un blog de éxito, ni una web comercial ó con publicidad, ni iba a recibir millones de visitas, ni iba a tener una opinión complaciente ú oportunista para conseguir lo anterior. Cuaderno de campo es un blog personal donde hablamos escribimos de los temas que nos interesan, que, como la vida misma, son muy variados (afortunadamente). Un día les contaremos como tunelar a través de SSH para tener salida HTML a través de un cortafuegos (1) y a otro dia nos ciscaremos en la madre que parió al presidente del gobierno por meternos en una guerra por petróleo (2), como iba diciendo, no hemos cambiado tanto.
Para valorar justamente la importancia de un telediario piense en una cosa: las noticias duran lo mismo todos los dias (independientemente de lo que haya pasado en el mundo).
El desvarío internacional
viernes, 18 de marzo de 2011 (Hace 209 dias)La ONU autoriza ataques para frenar a Gadafi.
No me parece mal que la legalidad o la ilegalidad de un estado se fundamente en la movilización popular; que un estado como el libio que ayer era amigo y aliado de Italia, Francia, España, etc, y que en función de esos lazos comerciales recibía -entre otros artículos- armas, hoy, con miles de personas en la calle, sea tratado con desconfianza y sean retiradas las muestras de apoyo internacionales (y no se le vendan más armas). Pero la intervención es un auténtico despropósito. Sigue leyendo…
¡Son 110!
domingo, 13 de marzo de 2011 (Hace 214 dias)Ciento diez, no, pero el otro día intentaron cobrarme 90 euros por la sustitución de las pastillas de freno de mi coche (bueno del de Mercedes), cuando ya habíamos acordado el precio de la reparación en 50 euros (por cierto, que el coche está a la venta por 1.000 leuros). Me jode que pasen estas cosas.
A la hora de pagar me atiende uno de los hijos y me dice que 90. Cómo que 90, si me dijo tu padre que eran 50. Y la mano de obra. No, la mano de obra estaba incluida que ya lo dejamos claro. Ah, no sé, aclárate con él. Dónde está. Ahora viene.
Al rato aparece. Hola, oye que dice tu hijo que son 90. Sí. Pero tú y yo habíamos quedado… Bueno, pues dame 50, que hoy contigo pierdo dinero. No, yo te pago lo que me digas, pero así no ganas un cliente. Es que la mano de obra (y tal y tal)… No me vengas con esas que tú sabes perfectamente lo que se tarda en cambiar unas pastillas de freno y ya lo habíamos dejado claro, si me dices 60 o 70 vale, pero 90… Dame 50. Toma.
La factura ¿La factura? Sigue leyendo…
Observando la longitud del brazo se da uno cuenta de que la evolución nos ha formado para pasarnos el día tocándonos los cojones. Todo lo demás es antinatural.