A la campaña “Si eres legal, eres legal” que comentabamos el otro día, le ha salido su antídoto “Si eres legal, comparte” para la promoción del copyleft.

fusca III

Frente a una sociedad mercantilista enfocada únicamente hacia la obtención del máximo beneficio económico, el hecho de compartir, promover y difundir el conocimiento y sus herramientas se convierte no solo en una necesidad sino en una filosofía e ideología política. Un ideología que no solo no cuenta con el apoyo del Ministerio de Cultura sino que es este el principal encargado en combatirla de la mano de la SGAE y su impresentable Teddy Bautista, en otro tiempo cabeza visble del PCE, y su consorte Ramoncín reconocido PSOEista (pagaría por escucharlos de viva voz hablar de la socialización de los medios de producción)

Pero no acaban aquí las contradicciones personales. Basta darse una vuelta por internet o charlar con los amigos para ver como los más encendidos defensores de los sus Emule-derechos tropiezan una vez y otra en contradicciones bastante lamentables ó simplemente ridículas.

Recientemente tuve que lidiar con la instalación de un router innalambrico cuyo dueño se empecinaba una vez y otra en bloquear el acceso con toda una batería de encriptaciones, contraseñas y bloqueos que evitaran que cualquiera pudiera conectarse a internet. Tras convencerlo de lo absurdo de capar de esta manera una conexión a un dispositivo que está encendido 2 horas al dia, con un radio de cobertura de apenas 20 mts. y con un ancho de banda bastante triste, solicitó sin pestañear que le instalase el Emule (¿para que? ¿para descargar a los que son tan desprendidos como tú? …. pues ya te aviso que hay poco-poco).

¿Hay algo más triste que una página sobre GNU/Linux cargada de banners pro-software-libre, anti-monopolio y cuyo segundo artículo se titula “Como bloquear el acceso a tu router con Ubuntu” ?

Si uno se dá vueltas por los foros de desarrollo Web (html, php, css, javascript) descubrirá con sorpresa como abundan los posts solicitando técnicas ó información que les permitan “hacer invisible el código de sus páginas web a terceros”. En lo que podría ser el colmo de los bochornos, solicitan la ayuda de desconocidos para bloquear sus contenidos a otros desconocidos (algo que además de complicado suele derivar en respuestas bastantes vergonzosas para el autor). Esto pasa a todos los niveles (aficionado y profesional). Los creadores y las empresas, se dejan los cuernos tratando de crear páginas web “cerradas” con técnicas copias una y otra vez a lo largo y ancho de la web. (el éxito de las aplicaciones Flash en internet está sin duda sustentado buenamente por este comportamiento anti-compartición).

¿Hay algo más triste que una de esas páginas web en las que al hacer click derecho sobre el documento te aparece una alerta de “(c) Fulanito 2008. Prohibido copiar“.? Pues sí, hay algo todavía más triste: una bonita foto un proyecto de bonita foto destrozada por una marca de agua que la cruza en diagonal, con una fuente enormente fea, semitraslucida, blanca, en la que se puede leer perfectamente: JOSEMARIA 2007.

(por dios! si quieres hacerle daño a la vista échate gotas de limón en los ojos. De esta manera los demás no nos enteramos y te ahorras el ridículo).

Realmente ¿que persigue este comportamiento? ¿que alguien utilice tu foto? y si la utiliza ¿cual es el problema?. Fijate, estamos en mundos paralelos. Yo estoy deseando que utilicen mis fotografías, mis vídeos, mis scripts, mis apuntes, mis conocimientos.
He cobrado y ganado dinero con todos ellos, ¿y sabes qué?, dura más y sabe mejor el orgullo y la satifacción de que dos fotografías tuyas sea utilizadas para ilustrar un artículo sobre las Azores en la Wikipedia Portuguesa, o otro sobre el árbol Garoé en la Española, o un artículo sobre la polinización de las abejas de la NASA, o que un experto en Malaria use otra para ilustrar su trabajo.

Comparte coño! que es más constructivo, divertido e inteligente que pasarte la vida tratando de dar un braguetazo con esa superfoto que hiciste hace dos años y que dada día que pasa vé menos gente y vale menos.

Difunde tus conocimientos y habilidades de forma libre, abierta y gratuita. La cuestión más irrelevante y peregrina que tú sepas hacer de forma magistral-amateur seguro que le es útil a muchos desconocidos. Y hazlo en un formato asequible a todo el mundo, independientemente de su poder adquisitivo, que solo les cueste tener que aprenderlo.

Has visto una película, ¿te ha gustado? ¿por que no dejas que los demás la veamos? ¿no sabes como? coño! pues pregunta, que es gratis.

¿De que tienes miedo? ¿a que te roben las ideas? ¿tan pocas ideas tienes? ¿las tienes contadas?, entonces tu problema es otro: estás a punto de morir.