Adianthum

La formas mas común, rentable, rápida y eficaz de reproduccir la mayor parte de los helechos que podamos tener en casa es sin duda por división de mata ó por esqueje, pero ni punto de comparación con reproducirlos por esporas. Es más lento, sin duda, pero cuando consigues sacar adelante uno de estos helechos, te aseguro que se convierte de inmediato en tu planta favorita.

Es más fácil de lo que parece a simple vista, solo hace falta paciencia, esporas y un ambiente muy pobre en oxigeno.

Los helechos son auténticos fósiles vivientes. Aparecieron sobre la tierra cuando la atmosfera era aún muy pobre en oxigeno. Entonces medraban y crecian por todas partes. Conforme el aire se fue cargando de oxigeno (en buena parte por culpa de los propios helechos) estos se vieron relegados hacia aquellos microclimas menos oxigenados donde sus esporas pudieran prosperar y convertirse en nuevas plantitas, es decir, zonas con un grado de humedad tan elevado que el oxigeno atmosferico se viese «desplazado». Es por eso que hoy en dia solo encontramos helechos en las umbrias, cerca de rios y lagos.
Del mismo modo que para combatir las bacterias, otro «fosil viviente», se aconseja ventilar la estancia ó desinfectar con agua oxigenada, para reproducir helechos necesitamos ambientes muy humedos y muy pobremente «ventilados».

Las esporas estan listas para usar si al pasar el dedo se desprenden y caen. En ese momento, puedes cortar la hoja ó bien con un pincel/brocha «raspar» en enves de la hoja para hacer caer las esporas sobre un folio blanco. Esparce las esporas sobre la superficie de un maceta donde vás a cultivarlas.

Utiliza un sustrato rico en materia orgánica, muy poroso y humedecido ligeramente antes de espolvorear las esporas sobre la superficie. No «entierres» las esporas. Cubre la maceta con un plastico transparente y cierra amarrando con un hilo ó goma elastica.

Situa la maceta en un lugar luminoso pero sin sol directo, entorno a 20ºC. En 1 ó 2 mes verás aparecer una especie de «moquillo» verde que cubre el sustrato, y en los cuales ya es posible distinguir algun futuro helecho. No abras ni rieges a no ser que el sustrato esté realmente seco.

Un més mas tarde ya se empiezan a desarrollar las primeras «hojas» verdaderas, y ya se distinguen una planta de otra. Empieza a agujerear la cubierta de plástico para renovar algo la atmosfera interior y que las nuevas plantas vayan adaptandose lentamente. Ahora empieza la fase crítica. Si se expone muy bruscamente a las plantas al nuevo «clima» morirán.
En todo el proceso, lo ideal, es no regar. Debería bastar con la humedad inicial suministrada en el momento de la plantación. Pero si necesitas hacerlo, mejor con un pulverizador que empape la superficie, o mejor aún, situando el contenedor sobre un plato con agua, hasta conseguir que el sustrato se empape absorbiendo desde abajo.

Cuando las pequeñas plantulas hayan desarrollado al menos una ó dos las «hojas», con ayuda de una cucharilla trata de desplantar una a una llevando con ella buena parte de la tierra sobre la que crecen. Una buena opcion, intermedia entre el semillero y la maceta final sería un pequeño acuario ó envase de cristal donde sigan madurando y creciendo antes del transplante definitivo.

OBSERVACIONES:
– El substrato ideal sería una mezcla de tierra vegetal y compost, con una generosa cantidad de materia orgánica. La descomposición de esta, produce CO2 que mejora el crecimiento de las plantitas.
– Si usas estiercol, procura que esté desinfectado y utilizalo en poca cantidad.
– No uses arena en la mezcla. No es necesario y tiende a apelmazar.
– Los transplantes siempre con cepellón, nunca a raiz desnuda.
– Mejor pulverizar que regar.
– No es necesario abonar, pero si decides hacerlo hazlo via foliar: añade en el agua de pulverizar abono comercial rebajado a la cuarta parte de la dosis recomendada.
– Aun despues de cortar una hoja con esporas «verdes», estan siguen madurando. Asi los restos de podas se pueden conservar un tiempo a la espera de que las esporas maduren.
– No almacenes las esporas, utilizalas de inmediato.