Es bien cierto, como dice Javier Vizcaíno en su último apunte (Izquierda cainita), que las izquierdas en España dedican gran parte de su tiempo a «pelear entre sí con más energía de la que entregan a derribar el sistema que tanto dicen deplorar».

También es cierto, como apuntan ciertos miembros de IU en su carta conjunta «Con tu quiero y con mi puedo» que la necesaria convergencia entre las izquierdas, verbigracia el «Podemos» que encabeza Pablo Iglesias es «un reto complejo pero necesario que se puede materializar si existe la voluntad política y la generosidad necesaria de todas las partes»

Generosidad que también reclaman los firmantes del «Manifiesto Mover ficha: convertir la indignación en cambio político«, con Pablo Iglesias a la cabeza, cuando afirman que «es más real que nunca nuestra exigencia de una mayor generosidad a los representantes, de una mayor horizontalidad y transparencia».

¿Por qué no es posible el acuerdo?
El panorama es complejo, como mostraban ya hace casi un año los periodistas Luis Giménez y Daniel del Pino en su artículo en Público:»Izquiera política y movimientos sociales: ¿Un futuro en común?«
porque son muchos y diversos los intereses de lo que podemos denominar «las izquierdas» españolas. Pero son muchas las voces que claman por un Frente común que se presente a las elecciones. Y aún estamos a tiempo de conseguirlo.

¿Cómo? pues de un modo muy claro que IU no debe evitar pero que no entra en la hoja de ruta de la dirección actual: las primarias. No es solo una cuestión de generosidad, es también un problema de legitimidad.

El PSOE y Equo ya han manifestado su intención de convocar primarias para elegir candidato. Cayo Lara ya ha dicho que en IU no las habrá. Los intereses democráticos de la población se supeditan a los orgánicos de esa institución de la izquierda. Mala noticia.

Ahora solo el máximo órgano de IU podría reconducir la situación y hacerle ver al Coordinador general su error. Pero eso solo será posible, antes de las elecciones europeas, si un numeroso colectivo de organizaciones y ciudadanos se lo exigen o si dentro mismo de su organización crece el disenso. ¡¡Presionemos!! para concentrar el voto de las izquierdas, para exigir a IU generosidad y así legitimar y hacer crecer su voto. Por mi que no quede.