Después de una larga semana, hoy por fín han llegado mi pedido de orquídeas de un lejano vivero en Holanda. Viendo la distribución del viaje del paquete, es facil adivinar donde se ha «gastado» esa semana y pico de viaje, a saber:
Dia 14 salida de Holanda. Dia 15 llegada a Madrid. Dia 17 llegada a Murcia. Dia 21 llegada a Cartagena.
Dejaré por hoy los tópicos acerca del lugar donde empieza-termina Africa.

El estado de las plantas es irregular. Tres vienen en buenas condiciones y dos más muertas que vivas. Al menos tuvieron en origen la precaución de NO regalarlas. Ocho dias metidas en una caja a oscuras y mojadas habría sido fulminante. El invierno es la mejor época para hacer compras de plantas al extranjero, pero hay que tener cuidado con las plantas mojadas durante una ola de frío.

La primera tarea ha sido transplantar o reconstruir las macetas, la segunda de inmediato al invernadero y tratamiento de urgencia.

Cuando se le pregunta a algún aficionado-profesional de la jardinería, ¿cuales son los nutrientes primarios que requieren las plantas?, invariablemente se responde que NPK: Nitrógeno, Fósforo y Potasio. Esto, si bien es cierto, no es del todo exacto, ya que antes de estos tres elementos las plantas consumen mucho más COH: Carbono, Oxígeno e Hidrógeno.

Normalmente este último trio (COH) se obvia, puesto que las plantas, en condiciones normales, disponen de ellos en abundancia (a través del aire y del agua) y no es necesario su aporte extra, cosa que no ocurre con NPK, en los que las plantas suelen ser deficitarias. Claro, en condiciones normales.

Una planta que ha sufrido un transporte como el comentado arriba, un transplante ó una granizada, no se encuentra precisamente en condiciones normales y es necesario echar mano de tratamientos extras que aseguren ó aumenten las posibilidades de supervivencia. A continuación os comento algunas observaciones y técnicas que aumenten las posiblidades de supervivencia de plantas en estado crítico. Evidentemente estos técnicas son perfectamente válidos y viables para plantas en pleno desarrollo y sanas.

Suelos ligeros

Las raices al igual que las hojas tambien respiran. La diferencia es que al no recibir luz, se comportan como lo hacen las hojas durante la noche: toman oxígeno y expulsan CO2. Es por esto que los suelos deben tener un buen drenaje y aireación, que evite el encharcamiento de agua y facilite la llegada de aire a las raices.
En suelos con un buen drenaje, los riegos frecuentes favorecen este intercambio de gases en el suelo y aportan oxigeno a las raices, sinembargo en suelos con un mal drenaje, arcillosos y pesados, es mejor regar poco ya que el agua produciría el efecto contrario: axfisiar las raices.

Agua de riego

Utiliza agua a temperatura ambiente, o mejor dicho, a la misma temperatura que se encuentre el suelo de la planta. Mejor agua reposada, blanda y oxigenada. Lo ideal sería agua de osmosis, de lluvia ó destilada.

Humedad

Cuanto mayor sea la humedad ambiental menores serán las pérdidas de agua por transpiración de la planta. Aleja la planta de las corrientes de aire. Si es necesario mete la planta en una bolsa de plástico grande, transparente y con unos pocos agujeros que permitan el intercambio de gases.

Luz

La luz estimula la fotosíntesis y por lo tanto el desarrollo de la planta. Si decides aplicar luz artificial a la planta utiliza luz fría, tubos fluorescentes mejor que bombillas. Emiten un espectro de luz más adecuado y no calientan. Pon la planta tan cerca como puedas de un tubo fluorescente para asegurarle un mínimo de 12-15 horas de luz continua.

Un tubo fluorescente de 18W a unos 30 ctms de la planta suministra luz suficiente a la mayoría de las plantas.

Pulveriza aminoácidos

Para casos de crisis graves las pulverizaciones a base de aminoácidos son fenomenales ya que permiten a la planta asimilar nutrientes incluso en el caso de carecer de sistema radicular ó encontrarse muy dañado. Los aminoácidos suelen venderse como productos para combatir los efectos del granizo ó helada, en los cuales la planta a perdido buena parte de sus hojas y suelen venir enriquecidos con Nitrogeno.

La mayoría son de origen animal y huelen fatal. No convienen abusar de su aplicación ya que pueden debilitar la planta y hacerla propensa a ataques de hongos. Una pulverización semanal.

Riega con aspirina

La fórmula de la aspirina es: C9H8O4. Es decir, Carbono, Hidrógeno y Oxígeno, precísamente los tres nutrientes más consumidos por las plantas. Al aplicarla en el agua de riego hacemos más accesible estos nutrientes a la planta, reducimos el gasto energético que le supone extraerlos y provocamos un «despertar» en el metabolismo de la planta inducido por unas pésimas condiciones ambientales.

Dosis: 1 aspirina para 5 litros de agua. La mejor manera de calcularlo y no equivocarse: Disuelve y mezcla una aspirina en 5 vasos de agua y de esta disolución añade un vaso por cada litro de agua de riego.

Ojo: reducir la dosis no afecta a la planta pero aumentarla si. Puede provocar un parón vegetativo, el efecto contrario al buscado. No aumentes la dosis, mejor quedate corto.

Respira con CO2

Si quieres afinar más todavía puedes meter la planta en un ambiente rico en CO2. Como el CO2 es más pesado que el aire, bastaría con meter la planta en el fondo de un cubo y hacer «llover» sobre la planta el anhidrido carbónico producido por una mezcla de levadura:
Dosis: En una botella de plástico añade un litro de agua, 6 cucharadas de azucar y una cucharadita de levadura de panadería (levadura natural no química. Maizena vende una muy buena, sino quereis iros hasta la panadería). Agitala bien. En pocas horas la botella comienza a emitir CO2 que tiende a llenar la base del cubo. Dependiendo de la calidad de la mezcla, la temperatura, etc.. la mezcla durará entre 6-12 dias.

Nota: En la fotografía se aprecia como el ambiente de la derecha, enriquecido con CO2 se acidifica (muestra de Ph amarillo).