Es impresionante el grado de tolerancia que las autoridades tienen con los toros o los encierros.
¿Os imagináis carreras de motos, de bicis, parapente, puenting, playas del litoral, concursos de taberna o discotecas mallorquinas que produjesen 10 personas muertas y decenas de heridas en apenas dos meses de veraneo?
Cualquier otra actividad sería prohibida ipso facto, recibiría inspecciones de hacienda y de sanidad… pero, en cambio los muertos a cuernos de toro caen como moscas y parecen ya formar parte de la idiosincrasia de nuestra climatología y aquí por más desastres que haya dimitir sigue siendo un nombre ruso…

¿Os imagináis lo que duraría una sala de conciertos si montase una valla de protección tal que así?

La grabación es de hoy en Torrecilla (Valladolid).